Bueno ya conocemos las intenciones de nuestra joven protagonista, ahora conozcamos un poco mas de ella, y como algunas decisiones no siempre porque los demás lo digan son erradas.
Cielo desde pequeña siempre fue muy poco agraciada, ya que le encantaba jugar con los varones de la aldea, pero a medida de que los años avanzaban su gracia también lo hacia, a la bella edad de 17 años Cielo era muy hermosa, su estatura era como la de las demás chicas de su edad, media 1:60 aproximadamente, su cabellera era muy lisa y de un bello color castaño claro, lo tenia muy largo, casi le llegaba hasta la cintura, pero no se le notaba porque siempre lo tenia tomado, sus ojos eran de un extraño color verde claro, sus labios eran muy finos, y cuadraban perfectamente con su cara, su nariz era ni muy grande ni muy pequeña, era adecuada, siempre mantenía una postura muy erguida, y siempre parecía que estuviera perdida en sus pensamientos, como si no estuviera en el mismo lugar que los demás, y de hecho así era, ella consideraba que nunca entendería a los aldeanos, por lo que le gustaba pensar que estaba en otro lugar, quizás explorando algún mundo real, no con falsedades de Deidades, lo que mas su corazón añoraba era salir de aquel aldea, pero no quería irse sin antes saber la verdad de aquella cueva.
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Violet. |
Faltaba solo un día para la gran ceremonia en honor del Dios Anas, y todas la muchachas se preparan un día antes probándose los vestidos que usarían al día siguiente, todas las chicas estaban muy alegres de probarse los hermoso vestidos que usarían delante de toda la aldea, y aun mas importante, de todos los muchachos de la aldea, claro todas menos nuestra Cielo, ella no encontraba atractivo a ninguno de los muchachos de la aldea, además del hecho que los encontraba a todos unos cabezas huecas, algo que a ningún chico le gusta escuchar; las chicas estando en una de las cabañas que se ocupaban para los preparativos de las ceremonias, se pusieron a jugar y travesear entre ellas, pues era costumbre que antes de la ceremonia todas las jóvenes que danzarían en la ceremonia, debían de dormir juntas para formar un vinculo más estrecho entre ellas, pero nada del mundo haría que Cielo considerara como iguales a las chicas que ella calificaba como descerebradas, una de ellas, quien era la líder de las populares, siempre que podía la molestaba, Violet que así se llamaba, era muy bella, lamentablemente no os puedo mentir, era de la misma estatura de Cielo, pero su cabello era ondulado, a diferencia de nuestra protagonista, también lo tenia largo, y era muy abundante, además sus rulos eran de un bello dorado, sus ojos cafés claros, y de piel muy blanca, como les dije hermosa, Violet aprovecho que estaban casi todas juntas para burlarse de Cielo, diciendo que sus locas ideas no eran más que locas fantasías, esto hizo que todas las muchachas estallaran en risas, aunque Cielo no tomaba en cuenta lo que los demás decían de ella, le dolían mucho estos comentarios, y una lagrima recorrió su mejilla.
- Oh lo siento, ¿herí tus sentimientos?- dijo Violet con un tono de sarcasmo en su voz.
- Claro que no- le respondió bruscamente Cielo- era solo una basura en mi ojo, discúlpame Violet, es que, cada cosa que sale de tu boca no es mas que eso, basura -dijo con una nota de sarcasmo y una sonrisa triunfante.
- Parece que te a vuelto a ganar Violet querida -dijo una de las muchachas que le tenia un poco de aprecio a Cielo, se llamaba Nube, después de decir esto todas las demás se pusieron a reír de Violet, y esta sonrojada de la vergüenza dio media vuelta y se fue. Nube era un poco más baja que Cielo, pero lo compensaba con su eterna dulzura, ella tenia el cabello casi se podría decir que azul, sus ojos eran de un bello color celeste, casi mágico, era como ver en un estanque de agua clara.
- Sabes -dijo dándose media vuelta de regreso hacia las demás -Porque no arreglamos esto de una vez por todas -dijo muy enojada y seria esta vez - Te reto a que entres en la cueva y traigas evidencia de que estuviste en ella y nada te paso, y así todos creeremos en tus locuras -dijo Violet con voz altanera -Y ¿que dices? ¿Aceptas, o admites que lo que dices no es más que mentiras y locuras? -termino Violet levantando una ceja, y cruzándose de brazos esperando que Cielo admitiera que ella tenia razón, y se avergonzara frente a todas las chicas.
Pasaron unos momentos y todas estaban en silencio, incluso Cielo, Violet estaba por darse media vuelta sabiendo que había ganado cuando....
- Lo hare!! - declaro al fin Cielo.
- Pero de que estas hablando Cielo querida - la interrumpió Nube - ¿Estas loca? o es que acaso no te has humillado ya bastante -dijo entre disgustada y preocupada.
- jajajajaja - su risa se escucho por toda la habitación - Deberías de escuchar a tu amiga Cielo, nunca lo harías, además aunque lo hicieras no te dejaran acercarte más allá de las puertas celestes (estas puertas eran tres maderos, que formaban un gran marco como de una entrada o puerta, solamente el marco), te detendrán en cuento te vean acercarte -dijo con voz triunfante Violet.
- Eres tu la que me a retado Violet, ¿acaso te estas retractando? -dijo con voz insolente Cielo - Además pienso escabullirme muy temprano en la madrugada, antes de que entre la sacerdotisa, y soy muy buena escondiéndome, tomare unas fotos con mi cámara, y listo, volveré aquí antes del baile -dijo con voz triunfante - Además nadie se tiene que enterar que no estoy ¿verdad? -dijo esta vez con sarcasmo.
todas las muchachas se miraban entre si, sabiendo que era una completa locura y suicidio tanto de que si existía un Dios o no, pero nadie dijo nada, todas querían saber la verdad tanto como Cielo, solo que nunca lo decían para no parecer locas.
- Por favor razonemos -dijo esta vez Nube, que era la única que se preocupaba del bienestar de Cielo- Cielo querida, ¿no estas hablando en serio?, ¿verdad? -Nube la observo un largo rato- Cielo -dijo cada vez mas preocupada- querida....
- Lo hare - dijo al fin Cielo- pero deberán estar calladas hasta que yo vuelva y no decirles a los adultos, menos a la sacerdotisa -les advirtió a todas las demás.
- "Si es que vuelves" -dijo Violet, quien resalto un tono de preocupación esta vez, es cierto que Violet era mala, pero no "tan" mala como para ver morir o desear la muerte de alguien.
- Estaré bien -dijo agradecida- Además me llevare el amuleto de mi abuela, que es en lo único que creo realmente -dijo honestamente Cielo mientras acariciaba un anillo de oro con una esmeralda empedrada- Además es algo que debo hacer, no lo hago solo por tu reto Violet, mi corazón quiere respuestas, y las tendré -dijo decidida- lo siento mucho Nube -dijo mientras le dedicaba una sonrisa triste a su amiga.
- Esta bien -dijo con lagrimas Nube- Después de todo nadie puede pararte -le dedico una gran sonrisa, aunque algunas lagrimas recorrieron sus mejillas.
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Nube. |
Después de eso, todas juraron no delatar a Cielo con los adultos, o mucho peor con la sacerdotisa, aunque les costara un gran castigo, todas se fueron a la cama, menos las tres niñas, ellas se quedaron despiertas para ayudar a Cielo, cuando Cielo estuvo lista para salir estas se despidieron de ella y le desearon lo mejor, hasta Violet la abrazo, y le dio un tierno beso en la mejilla, luego volvieron a sus camas, mientras nuestra protagonista se disponía a salir camino a la cueva sagrada.